sábado, 28 de septiembre de 2013

Desde la adolescencia me fascina la química inorgánica. La forma en que se acortan o alargan los enlaces. El concepto de átomo. Hablo de la posibilidad de unir o separar elementos, de aprehender la mínima expresión de un mundo y entrar en eso, de mirar algo hasta desarmarlo. La frustración/emoción de intentar encontrar algo, de no encontrarlo. Una molécula, una palabra. Un hallazgo, un poema.


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