Quiero compartir algo: acabo de hacerme un estudio genético para determinar si los cánceres que tuve y que tuvo mi hermana que murió, derivan de un gen alterado. No pensaba hacérmelo hoy. Yo iba muy tranquila caminando y me llamaron del laboratorio para combinar fecha para el análisis. Estoy a 8 cuadras del laboratorio, le dije a la genetista. Me dijo qué casualidad. Le pregunté si para hacerme el estudio necesitaba estar en ayunas. No, me contestó. -Estoy muy cerca, le dije, puedo hacérmelo ahora? ¿Ahora?, dijo y yo asentí. No le dí tiempo a dudar y le dije que ya estaba a 6 cuadras. Me tiré sobre el mostrador del laboratorio y firmé todo lo espantoso que nos hacen firmar cuando quieren asegurarse de que uno entendió lo que está firmando. Puse a todo que sí y estiré el brazo. Siento que lo de hoy no es suerte, hoy comienza una nueva etapa familiar, ahora sabremos si los dos tipos de cáncer que tuve fueron o no por mutación de un gen. Me acordé mucho del poemón de Sergio Felipe Mattano que se llama Lamento por las tetas de Angelina Jolie. Ella tiene la mutación genética que creen que tengo. En lugar del cuerpo de sex symbol de Angelina, a mí me tocó la poesía. Estamos a mano con el universo. Hoy es el día de todos los muertos. Un 2 de noviembre también presenté mi primer libro. Los muertos no me quieren con ellos. Celebremos.