lunes, 30 de mayo de 2016


¿Y si no fuera necesario mirarnos las manos para encontrar el óxido de todas las palabras abandonadas?




2 comentarios:


  1. No lo es, antes el óxido era lo que era, las palabras nunca pierden su caminito, el de la sangre en la mano, el de la sangre que no hace falta mirar porque se siente.
    Siempre gracias por tu poesía, Valeria, y un abrazo

    <a href="lasendadelarosadormida.blogspot.com/>m.</a>

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  2. Gracias por pasar y por comentar aquí. Saludos!

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