viernes, 26 de octubre de 2018


En un mes voy a conocer la casa natal de mi abuelo Luis. De él recuerdo que me dejaba comer helado sentada sobre su pantalón. Que era comunista. Que olía a tabaco. Que me preparaba batatas al rescoldo y, de postre, yema de huevo batida con azúcar. Que amaba a su pino porque le acercaba el olor del bosque. Que murió cuando yo tenía 7 años. Que desde entonces me descompone el olor a comida de hospital.  Que cantaba Chao bella ciao. Sí, los hombres de mi vida siempre fueron mágicos.


https://www.youtube.com/watch?v=Pa2Vvv2Gw1U



No hay comentarios:

Publicar un comentario