Comenzarán en unos pocos días
como presagio del otoño arcano
a deshacerse los plátanos cercanos
en volátiles pelusas de alegría.
Las veré revolotear sobre mi mano
con libertad y con alevosía
será el vaivén del viento apología
de la muerte repetida del verano.
Sé que me bastará mirar al cielo
¡Oh si pudiese abandonar el suelo
para evitar la alergia suspendida!
Mas sé que saltará cuan gato malo
sobre mi pelo oscuro como un halo
marrón de brevas sucias y molidas.